El look que hoy comparto lo llevé para una ocasión muy especial, mi sobrina la mayor se casaba, la boda de Carmen y Rafa.
No creo que encuentre las palabras para expresar la emoción tan grande que ese día experimenté, nos regalaron momentos maravillosos, cargados de emotividad en esta preciosa boda, que con tanto esmero y dedicación prepararon. Los reencuentros, los detalles tan bonitos, las sorpresas que nos dieron, hicieron que fuese una boda encantadora y única.
Con la novia he compartido muchos momentos, entre ellos están algunos del blog porque con ella lo inicié y muchísimos más de nuestras vidas. Me han hecho partícipe en la elección de sus trajes, tanto ella como él, la madrina y el padre de la novia, agradezco esa confianza por parte todos, me han hecho disfrutar muchísimo de esos momentos también.
Desde el primer instante quería un vestido rojo y hasta que no encontré el que tenía en mi pensamiento no paré, cuando me probé éste de Pronovias lo tuve clarísimo, la ocasión lo merecía!!Con un vestido como éste no se necesitan apenas accesorios, los complementos que llevo son sencillos, un bonito bolso dorado y los pendientes que son una joya vintage de mi madre.
Los novios guapísimos, habría hecho mil fotos más pero tanta emoción me desbordó, la felicidad de los seres queridos, es nuestra felicidad, así lo viví.